ciudad ajedrez .com
La prueba definitiva: derrota o victoria
 MENU GENERAL INICIAR SESION    REGISTRARME
ciudad ajedrez
     
Ver usuarios

Enviado por: Javier_Vargas Ver más artículos
Redactar un artículo
en Ciudad Ajedrez

COMPARTIR Windows Live facebook twitter Blogger email


Visitas: 68        Comentarios:

La prueba definitiva: derrota o victoria
Enviado en: 05-05-2017

La prueba definitiva: derrota o victoria

Por Javier Vargas Pereira

 

El ajedrez es la réplica miniaturizada de una guerra. Su sustrato principal es de carácter agonal, término que antiguamente se refería a los debates, luchas, competencias y juegos públicos que  se celebraban en honor al dios Agonio. Todos los deportes conllevan esta condición, pero el juego ciencia es el que más se acerca al sentido original del término: debate entre dos personas. Una partida es una intensa controversia de ideas, juicios, razones y argumentos. Como en la vida real, para lograr el éxito ante el tablero es necesario concentrar la atención, reflexionar, desarrollar la creatividad, economizar energías y fortalecer la voluntad. El científico y político estadounidense, Benjamín Franklin (1706- 1790) dijo: “La vida es como el ajedrez: con sus luchas, sus competiciones y sus acontecimientos buenos y malos.”

La psicología ha demostrado que el factor agonal obedece a uno de los instintos más profundos del ser humano: la conservación de la especie. Interviene a partir de lo que cada quien cree que le pertenece. Según el historiador Joan Huizinga, en su libro, Homo Ludens, “el elemento agonal empieza a actuar en el momento en que los adversarios se consideran como enemigos que luchan por una cosa a la que pretenden tener derecho. Aun en el caso en que su voluntad bélica no haga sino ocultar el hambre, lo que pocas veces ocurre, la guerra se presenta como asunto de obligación sagrada, de honor o de venganza. El empeño por el poderío material, hasta en condiciones de cultura desarrollada se halla, en la mayoría de los casos, subordinado por completo a motivos de orgullo, la gloria, el prestigio y el esplendor del predominio.”

Para el sociólogo M. Bouet, “La función agonal disciplina y satisface uno de los instintos más profundos del ser humano, el instinto combativo, que está estrechamente ligado por una parte al de la conservación de la vida y al instinto sexual por otra.”

Desde la filosofía, el pensador alemán Frederic Nietzche soñó con una civilización agonal sin restricciones. Seguridad y dicha no serían importantes para él y, por consiguiente, al factor agonal le correspondería el doble rol de reconocer la naturaleza humana y a la vez ser su regulador. Si el instinto combativo es vital para la sobrevivencia, no sería conducente suprimirlo, sino buscar su canalización. Es donde tienen un rol importante los juegos y competencias como el ajedrez, los deportes, la educación y, en un plano superior, la cultura. El sociólogo Roger Callois, en su libro, Los juegos y los hombres, dice: “No es absurdo intentar un diagnóstico de una civilización a partir de los juegos que en especial prosperan en ella. En efecto, si los juegos son imágenes de cultura, de ello se sigue que en cierta medida una civilización, y en el seno de una civilización una época, puede ser caracterizada mediante los juegos. Ellos muestran su fisonomía general y ofrecen indicaciones útiles sobre las preferencias, las debilidades y las fuerzas de una sociedad dada en algún momento de su evolución… Los juegos crean hábitos, provocan reflejos.”

De manera que el ajedrez, los deportes y las artes en general, son formas lúdicas de disciplinar y sublimar los instintos combativos. Entre sus características generales destacan la tensión y la incertidumbre. La seriedad con que se lleva a cabo cualquier partida de ajedrez no niega su carácter lúdico. Se lucha por la victoria del intelecto, que a su vez se relaciona con el honor y el prestigio.

Desde sus orígenes, el juego ciencia figuró una batalla, aunque su fin era demostrar que el intelecto puede superar a la fuerza bruta. Una leyenda árabe dice que cuando la esposa de un rajá belicoso se cansó de las constantes guerras de su consorte, le enseñó a jugar ajedrez, un pasatiempo tan apasionante, que el peleonero olvidó los conflictos y una agradable paz se instauró en todo el reino.



Desde la psicología, el maestro estadounidense Ruben Fine (1914-1993) dijo: “Resulta que el juego del ajedrez es un sucedáneo del arte de la guerra. El motivo subconsciente que impulsa a los jugadores no es el simple afán de agresividad característico de todos los deportes de competición, sino el más avieso del parricidio.”


 

El ex campeón mundial Emanuel Lasker, en su Manual de ajedrez, dijo: Hoy en día, las batallas en que luchan los hombres (la guerra, las negociaciones diplomáticas, las competencias en producción, por mencionar sólo algunas) son conducidas en forma muy torpe. Que las guerras deban parecernos una necesidad, es una prueba de nuestra estupidez… Es verdad, el ajedrez no resuelve el problema de comprender las batallas de la vida, pero lo coloca en términos precisos apuntando a una solución.”

 

El juego ciencia refuta la violencia no sólo con la fuerza de las ideas, sino con las reglas, la ética y la razón. El filósofo alemán Friedrich Nietzsche (1844- 1900) dijo: La guerra vuelve estúpido al vencedor y rencoroso al vencido.” A lo que el escritor Thomas Mann (1875- 1955) agregó: “Es la salida cobarde a los problemas de la paz.” Por su parte, la doctora mexicana Juliana González, en su libro, El Ethos, destino del hombre, dice: “Frente a la fuerza de la violencia, el hombre tiene siempre la fuerza de la virtud, del esfuerzo ético por trascender la barbarie… dentro y no fuera de su esencia humana.” Por eso el teórico Anthony Saidy, ha afirmado: “El ajedrez es más que un juego o una lucha. Es una ciencia, con principios, datos registrados e hipótesis sujetas a la prueba definitiva: derrota o victoria.”


 facebook A  17 personas les gusta este artculo



Artculos de Javier_Vargas
agregar comentario
Agregar comentario: Número de caracteres:


Para agregar comentario debes Iniciar sesinAQUI
telpago1
muy bueno el articulo sr javier ,en mi opinion el ajedez es una lucha en que por medios estrategicos y tacticos puedo resolver los problemas,nos enseña como en la vida preparandonos ,con sentido comun puedo lograr mis metas .NO estoy de acuerdo con tanta teoria falica ,que si parricidio etc etc.Es un gran ejercicio intelectual y quitarle ese velo de misterio lo que pasa es que no empleamos el metodo y la tecnica correcta de pensamiento para encon  
 
telpago1
muy bueno el articulo sr javier ,en mi opinion el ajedez es una lucha en que por medios estrategicos y tacticos puedo resolver los problemas,nos enseña como en la vida preparandonos ,con sentido comun puedo lograr mis metas .NO estoy de acuerdo con tanta teoria falica ,que si parricidio etc etc.Es un gran ejercicio intelectual y quitarle ese velo de misterio lo que pasa es que no empleamos el metodo y la tecnica correcta de pensamiento para encon  
 
fin de la informacion

EL art??culo y su contenido es responsabilidad del autor del mismo